Dante Panzeri, el inolvidable periodista que se hizo famoso por sus opiniones ácidas y sus definiciones precisas, hablaba del fútbol como la dinámica de lo impensado. Esa afirmación que le cabe como anillo al dedo a las actualidades de San Martín y Deportivo Morón que se cruzarán, el sábado, a las 18, en el oeste del Gran Buenos Aires.
Hace algunos meses, la expectativa de este duelo era ver a un equipo protagonista, que se armó para luchar por el ascenso, como el “Santo”, ante un “Gallito” austero, que regresó a la categoría tras 17 años de ausencia. Pero todo cambió en pocas semanas.
San Martín y Deportivo Morón están haciendo campañas similares. Sin embargo, por las exigencias y la jerarquía de sus planteles, las sensaciones por ese desempeño son completamente distintas.
Los dirigidos por Diego Cagna no tuvieron el arranque que esperaban y aunque aún ostentan la chapa de invicto, están lejos de tener el funcionamiento ideal. Y ahora se toparán con un rival que, si bien tiene un punto menos, llega con los ánimos por las nubes.
El conjunto dirigido por Walter Otta mantuvo la base que logró el ascenso a la B Nacional y es la gran revelación de la Copa Argentina. Acaba de eliminar a Olimpo y en semifinales se cruzará con River. Pero eso no es todo. En la Copa se dio el gusto de ser el verdugo de cuatro equipos de Primera: antes de Olimpo, eliminó a Patronato, Unión y San Lorenzo.
En La Ciudadela siguieron de cerca las últimas presentaciones del “Gallito”, estudiando cada detalle del próximo adversario.
“Es un rival duro. Por eso, durante esta semana hicimos hincapié en la idea que tenemos que recuperar el nivel de juego”, explica Cagna, quien se imagina un duelo exigente y trabado. “En esta categoría, casi todos los equipos priorizan el juego friccionado. Por eso debemos tratar de jugar para marcar la diferencia”, agregó el entrenador.
En tanto, Ignacio Arce explicó que el trabajo a largo plazo fue uno de los grandes aciertos del sorprendente Morón. “Es un equipo que lleva varios años de preparación y además, cuenta con muy buenos jugadores. Igualmente, si nosotros jugamos bien estamos en condiciones de volver al triunfo. Depende de San Martín”, argumentó el arquero en diálogo con LG Deportiva.
“Nacho” piensa que lo mejor que puede hacer San Martín es sacarle provecho a la amplitud del terreno de juego de la casa del “Gallito”. “Es un campo que puede favorecer a nuestro estilo. Estará en nosotros ser inteligente ante un rival que saldrá anímicamente motivado por los buenos resultados que viene rescatando. Es una linda ocasión para empezar a recuperar terreno”, concluyó.
Morón tiene una mística y una suerte extra que lo llevaron a alcanzar objetivos impensadas. Está en un momento inmejorable, gracias a la base del equipo que logró volver a jugar la B Nacional, luego de 17 años. Walter Otta mantuvo la estructura del equipo que logró el ascenso y avanzó hasta las semifinales de la Copa Argentina donde venció a varios equipos de Primera, con algo de suerte, pero a quienes les jugó de igual a igual. Ahora debe medirse con River y confianza es lo que sobra. Este equipo se conoce casi de memoria. Su estructura colectiva equilibra la balanza antes rivales con mejores individualidades. Sus figuras son Rodrigo Díaz y Javier Rossi; cuenta con dos arqueros en un gran nivel y un buen recambio, donde se destaca Damián Akerman goleador histórico del “Gallito”.